Hay fascinaciones que no entiendo, como por ejemplo
el amor a los autos imposibles de comprar (o ver, dependiendo de que estrato
social vivas) o el amor al fútbol, lo veo raro, lejano y sin sentido pero esto
tiene su razón y esa es que no entiendo. Por ejemplo el fútbol, por muchos años
mis amigos, familiares y gente que conozco han demostrado un gusto por este
deporte y en algunos casos un verdadero amor que influye en sus redes sociales,
esos café o bares en los que nos reunimos y que cabe en unos cuantos megabyte
como aplicaciones en el teléfono, por periodos puedo leer en estados de
facebook, twitter y demás el progreso actual de los partidos. Leo
frecuentemente comentarios, bromas internas que millones reconocen, bromas para
amigos que llevan una vida conociéndose y se pueden decir cosas que
a oídos extraños no tienen sentido pero que para ellos es tan
natural como decir "Hola, como te va vos pisado", así vivo la
pasión del fut, entre comentarios que no entiendo y nombres que significan
mucho en su casa y en millones de hinchas, pero lo cierto es que todo es tan
lejano y extraño como la cultura conservadora de izquierda del habitante de una
luna de *Perseo.
Todo esto viene a que me siento extraño a este
mundo tan familiar para otros y que por mucho tiempo no entendí pero creo que
ya lo sé, lo cierto es que no entiendo todo este mundo porque, precisamente, no
lo entiendo, nunca traté de ver las reglas, de entender los conflictos que trae
el que un jugador no de el cien por ciento en cada partido, que un equipo se
mueva como uno solo y que supere tácticamente y espiritualmente a su
adversario, el que un técnico es odiado o peor por trabajar como mejor le
parece, ciertamente el fútbol es un arte y yo no lo entiendo, es el cubismo de
los deportes para mí, puedo entender las reglas pero no su belleza y mi
conclusión después de tanto desvarío es que esto está bien, no
entenderé el fút como mis congéneres pero tampoco espero que
entiendan mi fascinación por Hedwig and the angry inch o la
obra de Santiago Rusinol i Prats y eso está bien.
*Planeta inventado por mí y que de seguro ya
existía desde antes que yo lo inventara.